No podemos entender la obra de Pedro María Asensio sin retroceder hasta sus primeros años de formación en Cuenca. La influencia de los principales actores del Museo Abstracto Español ―Zóbel, Torner, Saura, Guerrero, Sempere y Rueda― ha sido determinante en la forma y en el fondo de su producción artística. Desde mediados de los 70, esta influencia conformará la base de sus pinturas y sobre ella irá incorporando en las dos décadas siguientes nuevos hallazgos de grupos y corrientes, como Fluxus o los neoexpresionistas, que le seducen.